miércoles, 23 de octubre de 2013

Los niveles del Despecho



¡Ah, el despecho! Fuente inagotable de inspiración y de interesantes reflexiones sobre las relaciones (y la naturaleza) humanas.
Este maldito sentimiento que toma tantas diferentes formas (y que genera horas y horas de conversación entre amigos, todo hay que decirlo) ha sido el objeto de mis más recientes investigaciones y he descubierto algunas clasificaciones, según el grado de intensidad, que podrían aplicarse a tan popularizado concepto.

Si bien puede experimentarse cada uno de forma aislada, lo más normal es ir en orden, aunque si empieza con el más leve, siempre estamos a tiempo para evitar pasar al siguiente. Pero seamos honestos, lo más frecuente es que se siga por la senda de cabras hasta el barranco.
Pero el primer paso es reconocerlo, así que espero que mis investigaciones sirvan para que algunos se detengan antes de pasar al siguiente nivel.

Grado 1: ¡Au!
Remedio recomendado: cerveza y vino en cantidades moderadas
Sí, más o menos así suena nuestra autoestima cuando el objeto de nuestro interés no se digna mirarnos. En realidad esto no sería tan grave (puede pasar con cierta frecuencia sin dejar huella visible) si no insistiéramos en pasar al:



Grado dos: ¡Auch, auch!
Remedio recomendado: Una botella de vino, un par de cubatas
También conocido como “el que la sigue la consigue fracasado”. A veces insistir un poco está bien, tampoco hay que ser derrotistas, siempre que dé resultados palpables. Pero si esto no ocurre en periodo de tiempo más o menos corto… bueno, es masoquismo encubierto, en honor la verdad.
Otra versión de este grado de despecho es cuando una relación se ha terminado por motivos ajenos a nuestra voluntad, y en lugar de ir a emborracharse con los amigos, tal como corresponde a tan penosa situación,  insistimos en llamarle y, aún más, rondar por su casa, trabajo, gym, etc, etc.
Una retirada a tiempo es una victoria, dicen. Pero algún despistado tal vez no lo haya escuchado y caiga de cabeza en el…



Grado 3: Me ca…
Remedio recomendado: Una botella de vodka, un par de chupitos de tequila
El que busca encuentra ¿no es cierto? Si seguimos esperando y, lo que es peor, espiando al objeto de nuestro afecto, más tarde o más temprano (por lo general es temprano, pero me atrevería a decir que tarde duele más) aparecerá con alguien más.
¿Hemos tenido suficiente? Una persona que haya decidido por fin dejar que sea su cerebro y no su corazón el que guíe sus acciones, sí.
Pero el corazón es muy obstinado y muchas veces encuentra la forma de imponerse y llevarnos al…



Grado 4: La madre que l…
Remedio recomendado: Prueba con el absentha
¡Venga ya! Está con otro/a ¿quieres dejarlo ya?
Son frases que se escuchan frecuentemente cuando se entra en esta fase. Pero vivimos en tiempos muy malos y la tentación de espiar un poco a la persona que nos ha ganado la partida es escandalosamente fácil, justo al alcance de tu Facebook.
No hay manera de que esa investigación termine bien. Si resulta ser una persona guapa, inteligente, maravillosa y digna de ser prota de una peli de Disney, nuestra autoestima se arrastrará por los callejones, colocándonos en una posición de vulnerabilidad máxima de la que cualquier estúpido con ganas de acción podría tomar ventaja. Y un día, de repente, te despiertas y tienes miedo de mirar quién está a tu lado. Pero ese es otro tema.
Si, por el contrario, él o la elegido/a en cuestión resulta ser feo, tonto o ambas cosas (justo como ocurrió con mi muestra más inmediata), se experimentarán una serie de sentimientos de todos los colores. A saber: rabia por haber estado enganchado a alguien más superficial que el polvo de la tele, dudas de tu propio atractivo porque, al fin de cuentas, el otro se ha llevado el “premio”, ganas tirarles un cubo de aguar hirviendo cuando les ves pasar, deseos de vomitar cuando ves publicaciones mutuas en las redes sociales… y así, por el estilo.
Aquí también interviene el factor vulnerabilidad, pero curiosamente, la experiencia  vivida nos hace subir las antenas, con lo que ni siquiera seremos de capaces de tener un rollete alcoholizado. 
No sé que es peor. Bueno, sí lo sé. Lo peor sería continuar al…



Grado 5: Que alguien me mate, por favor
Remedio recomendado: Arsénico
Por motivos de salud he tenido que retirarme de la investigación antes de llegar a explorar esta etapa. Pero mi sagaz intuición me dice que es terreno resbaladizo y que lo mejor es no pisarlo.
Distancia y buenos amigos nos ayudarán a salir del hoyo. A fin de cuentas, no hay nada que no cure un buen mojito ¿no?




La Dama de Espadas

domingo, 20 de octubre de 2013

Protocolo social mojitero: Las citas-café

 
 
 
 





       Queridos mojiteros, tras mi exilio vacacional voluntario y un breve secuestro laboral involuntario, ya procede volver a éste vuestro blog canalla de referencia. Y para hacerme perdonar por este comportamiento tan poco ejemplar, tiro de pestaña y me permito estrenar nueva sección. Hoy, me voy a permitir la licencia de hablar de las citas-café (CC). Cuando llevas unos años en el mercado single, sabes que existen determinados signos que determinan si vas por buen camino con ese candidato a chulazo o no, y a veces, no es necesario llegar a una cena para saber si te vas a estrellar o no. No os hagáis los interesantes que ya sabéis a qué me refiero. Podríamos haber entregado el manuscrito a Planeta y retirarnos a vivir a Bali, pero eso no da buen karma y sin buen karma, según Estée Lauder te salen patas de gallo y tu piel pierde elasticidad antes de tiempo y una mujer de mundo sabe que una buena crema antiarrugas es muy cara. En resumen, vamos a tirar de miserias propias y ajenas para ir al fondo del asunto….vamossssss.

 

EL QUIÉN

 

      Una CC puede tener diferentes connotaciones dependiendo del origen de la petición. Si tenías un día Loreal-porque-tú-lo-vales y te viniste arriba tras el tercer café de la mañana y finalmente tras 3 meses espiando a tu nuevo compañero de oficina te decidiste a invitarle, el chulazo juega con ventaja ya que sabe que estás interesada aunque sea sólo un efecto secundario de la cafeína, así que al loro. Si fue una cosa común, anótate minipunto ya que hay altas posibilidades de triunfar ya que el interés es mutuo.

       Si quien hizo la propuesta fue él, dependerá del origen del solicitante. Si es tu amigo de toda la vida, por mucho que te atraiga, probablemente te va a endosar un comité de crisis sobre Lidia, rubia siliconada que está intentando ligarse desde hace medio año. Si es el susodicho oficinista, habemus interés. Evidentemente, las CC a ciegas merecen por sí solas una entrada aparte y respecto a CC que te organicen parejas de amigos, sólo diré una palabra: huye.

 

EL CUÁNDO

       Como he dicho millones de veces, el momento lo es todo en la vida, mojiteros. Las cosas te tienen que llegar cuando las necesitas, de nada sirve que el guapo de tu instituto te tire los trastos en la reunión del décimo aniversario de la promoción siendo portador de ESA barriga cervecera. Un poco de orden y concierto. Y una CC no siempre llega en el momento adecuado. Lo ideal es que sea el primer contacto que tengas con el chulazo a solas, ahí minipunto, ya que podrás tantearle en solitario en vivo y en directo y vaticinar cual Rappel en tanga de leopardo si hay interés o no.

       Si no es el primer contacto, en este caso, el orden de los factores sí altera el producto. Una mujer de mundo sabe que lo correcto es una progresión CCCC café-cine-cena-cama, todo lo que no lleve este orden, está abocado al desastre o a la chorboagenda, para los más prácticos. Para entendernos, si ya habéis cenado y lo siguiente que te proponen es un café, las posibilidades de convertirte en la amiga simpática suben en un 80%.

      En caso de chulazos conocidos durante una espiral de música disco y caciques-cola, afirmó Mathilda Jackson-Five, socióloga del Departamento de la Universidad de Torrepacheco City, en su última conferencia en Washington DC (“Coffee-date: the real facts”) que todo paso en una siguiente cita que conlleve menos alcohol y más diurnidad equivale a aumento exponencial de interés masculino. Es decir, que si el mecenas del ron del sábado noche te acaba de llamar pidiendo tomar un café, quizá quiera saber algo más de ti que tu cubata favorito. Palabra de Mathilda.

 

EL DÓNDE

       Ya sabéis que soy una amante de los pequeños detalles y éste es uno de ellos y no por menos importante. Si te lleva a un McDonalds o Starbucks, mal rollo, ya que cualquier hombre latino medio (por tanto aplicable también a italianos) nunca toma café en estos lugares a no ser que se encuentre en modo turista o no quiera que le vean conocidos contigo. En el otro extremo, están los que te llevan a su cafetería favorita, yo de ti iría poniendo las flamencas del Whassapp en el chat de tus amigos, porque hoy triunfas.

      

       Los que te llevan a alguna cafetería cerca de su trabajo o son workaholics o tienen varias CC simultáneas el mismo día (o ambas a la vez) y si el lugar es el Bar Pepe, cañas a 1€ y tapas variadas especialidad en croquetas, es porque te está tanteando y si finalmente, no le gustas, no tener que volver para pasar vergüenza ajena.

 

EL QUÉ

       Por definición, cuando una va a una CC se pide la consumición más rápida por si las moscas, que sería un café solo, las más atrevidas, un cortado. Ninguna mujer de mundo en su sano juicio se pediría un capuccino, porque si la cosa acaba en desastre, al margen del riesgo de hacerte un bigote Pancho Villa (chantilly versión 2.0), vas a tardar más tiempo en huir. La cuestión son los extras que se pide él. En caso de no pedir nada más, el éxito de la cita es equivalente a su duración, a más tiempo, más posibilidades de una segunda. Si observas que se pide un croissant, unas tostadas con jamón y un bikini, implica que está tan interesado que está intentando alargar la cita. Eso o que tiene un estómago del tamaño del Camp Nou.

 

       Evidentemente el look con el que se nos presente, también da una idea del nivel de triunfo. No es necesario venir en plan editorial del September Issue de Vogue Uomo, pero señores, un poco de atención. Si un mojitero os ve aparecer en chándal, bambas y calcetines blancos, os aseguro que a la que acabe su espresso va a huir dejándoos con la palabra en la boca. La que avisa no es traidora. Que aparezca perfumado también es digno de flamenca del Whass en tu chat de amigos. Un leve aroma a Egoiste Platinum o Dior Homme hace obviar, muchas, muchas cosas, ains……

 

EL NÚMERO DE CCs

Esto, ayyyy, esto es digno de una nueva entrada, jajajaja

To be continued…..




 

Divinamente cafetera,

Miss Souvenir

martes, 15 de octubre de 2013

TopTen Kylie Minogue

Amig@s, compatriotas, mojiter@s tod@s,

ayer en algún sitio del globo el representante de Kylie Minogue lanzó el comunicado que ella y nuestro Andrés han roto su compromiso. Ni media hora después la red ya iba hasta arriba de fotos y rumores sobre nuestro chico y Úrsula Corberó.

Como mojitera y como mujer quiero denunciar el poco respeto mostrado hacía una diva como Kylie, que ante todo siempre ha sido una señora, y a ella quiero dedicar este TopTen para ayudar en momentos de despecho.

Llegados a este punto de confianza si me permites Kylie te voy a llamar Ky a modo cariñoso.


10. Tvshow

Sólo una grande empieza su carrera con ese peinado y termina de gran diva. Además se puede comprobar la que vale mejora con los años (Ky, la Preysler y mi madre) y la que no, hace un Duquesa de Alba y empeora segundo a segundo. ¿Ataque gratuito? puede, pero eso se lleva en los genes y sino mirad a la duquesita.



9. Escotes de infarto

Que nos cuente el truco porque a mi sólo se me ocurre mucho esparadrapo o cinta adhesiva de doble cara. Y no os riáis que vosotros pensáis lo mismo y el que esté libre de haber usado cinta adhesiva en algún modelo que tire la primera piedra.



8. No sin mis tacones

Ky has demostrado que hasta las chicas de 1'50 pueden tener a un chulazo alto sólo con el gesto de calzarse unos Manolos. No obstante se te ha visto muchas veces con él de plano con manoletinas o deportivas. Eres una gurú y punto.




7. Paquita la del Barrio

Sabemos que está muy lejos de tu estilo, pero nadie tiene que saber que te pones su canción. Si no pillas mucho el acento ya que tu español creo que es justito avísame y te hago una traducción de calidad. "...two feet rat, I am talking to you..." Pakit of the Neighbourhood



6. Al mal tiempo... brilli brilli

Ky superaste el cáncer de mama y diste un ejemplo mundial así que otro minipunto para ti.




5. Insincero

Si no he entendido mal, el muy fresco de tu ex lleva con esa lagarta juancha desde abril y no nos avisó ni a ti ni a mi que era la siguiente en la lista. Eso es propio de un destructor y un insincero. No queremos ni una lágrima derramada por ese hombre, en caso de debilidad o mojito o gintonic a dosis elevadas. Estamos contigo, recuérdalo. Por suerte o por desgracia a una cada día no la deja Velencoso.


4. El despecho se cura con...

Un disco de platino y ya te digo yo la lista de canciones: la primera dedicada al despecho, la segunda al jodido de tu ex (jodido con todo el cariño, que ya sabéis que lo quiero mucho), la tercera a la fresca de su nueva novia, la cuarta a la manías del maromo y la quinta al nuevo chulazo que te has agenciado. Lo que no te voy a consentir es una canción dedicada a tu anterior familia política ya que son un encanto y te han defendido siempre, incluso ante algunas desaprensivas que iban a su restaurante y te llamaban llavero rubio. 


3. Merecidas vacaciones

Sólo una grande se pasa el verano en casa de Domenico y Stefano, por supuesto hablo de Dolce y Gabbana. Ky eres grande!



2. Confianza ciega

Dejaste a Lenny Kravitz, cortaste con Olivier Martínez y cuando ya nadie daba un duro porque te superaras saliste 5 años con Andrés... eres grande y sabemos que el siguiente será mejor. El mojito tiene un TopTen de empotradores así que Ky cuando quieras lo repasas y escoges el que quieras porque tú puedes y lo vales.


1. Reality bites

Si te ves apurada con el tema chulazo, llamamos a Luján y te montamos "Un príncipe para Kylie" y te llevaremos a lo mejor de cada casa, prometido.



Y le dedicamos esta canción a tu ex. De nada




Malignamente,

Madame Paddock


PD: el mojito pide disculpas por este parón pero alguno de los componentes se ha enamorado y estábamos poco despechados para escribir posts de calidad. Hacemos un Borbón y os decimos que lo sentimos mucho y esto no volverá a suceder. Nos debemos a vosotros.

Cuanto daño nos hizo... el jet lag

Querid@s mojiter@s tod@s,

Las vacaciones son para disfrutarlas, desde luego. Y ciertamente, cuanto más lejos nos vayamos y más exótico nuestro destino (lleno de surferos estupendos a los que repasar con disimulo... O con todo el descaro, ¡qué cojones! O si no, que no estuvieran tan buenos), pues MEJOR.

El problema viene a la vuelta, cuando el cambio horario se apodera de tu mente y no te deja ser persona de provecho. Vamos, que a las ocho de la tarde te estás muriendo de sueño mientras tu pareja se muere por la falta de sexo nocturna a la que tan bien acostumbrad@ le/lo/la tenías antes de tu marcha. Pobres almas en desgracia. No sólo tienen que aguantar que tú te lo estés pasando de p. madre mirando maromos pasearse, sino que además a la vuelta no se les puede dedicar la atención esperada.

Ahora diréis... ¡pero si desde que amanece, apetece....! ¡Aprovecha la mañana! Y digo yo... ¿¡COMO!? Si te despiertas a las 5 am y para cuando son las 8, estás tan hart@ de dar vueltas en la cama que de lo único que tienes es ganas es de salir pitando a desayunar para tener la sensación de que haces algo de provecho en tu vida.

En fin... ¡Qué difícil es esto del jet lag! No levanto cabeza... Pero bueno, bien sabéis que soy un hombre de recursos, así que para la próxima vez que viaje sin pareja (porque si viajas con él, ella o ello, el problema es mutuo, compartido y mucho más llevadero), tengo que buscar opciones... ¡Ojo! Factibles y sin que incluya el uso de drogas duras, que nos conocemos (y no miro a nadie).

De momento no se me ocurre ninguna... que con el daño que me está haciendo el p. jet lag, no puedo ni pensar... ¡¡¡Intentaré mantenerme suficientemente despierto para rendir a la noche!!!!


Amuermadamente vuestro,


Barón Von Bruise